Pequeños reportajes – Diciembre
2017
Ginkgo biloba – un fósil viviente
Árbol caducifolio – que pierde
las hojas cada año, generalmente en invierno – que pertenece a la familia
gingoáceas, de nombre científico Ginkgo
biloba, el cual es un verdadero fósil viviente, ya que se han encontrado
fósiles que datan del Jurásico, por lo que se dice que puede ser la planta
gimnosperma – plantas vasculares espermatófilas, productoras de semillas – más
antiguas. Es el único árbol del mundo sin parientes vivos. En botánica forma su
propia división Ginkgofitos, algo que
no sucede con ningún otro vegetal. Hace millones de años existían muchos tipos
de ginkgos diferentes en nuestro planeta, pero todos fueron desapareciendo
salvo el Ginkgo biloba, que
sobrevivió en pequeños reductos naturales y en algunos monasterios de China y
Japón. En Europa solo se conocían ejemplares fósiles hasta que en 1691,
Engelbert Kaemper (1639-1716) – médico, botánico y explorador alemán – estando
trabajando en Japón, descubrió ejemplares de ginkgos vivos en uno de los
santuarios japoneses que visitaba, de los que recogió semillas que
posteriormente plantaría en un vivero de Utrech, logrando que floreciera uno de
los primeros ginkgos en Europa, donde todavía permanece. Los describió y
clasificó en su obra “Amoenitatum
exoticarum” publicada en 1712. Es una especie con una enorme capacidad de
resistencia, que se caracteriza por su gran longevidad ya que se han localizado
ejemplares vivos de más de 2500 años, incluso ha sido capaz de resistir pruebas,
tan destructoras para la vida, como la bomba atómica lanzada sobre Hiroshima en
Japón. Un año después del estallido de la bomba, en la primavera de 1946, a
poco menos de un kilómetro del epicentro de la explosión, un viejo Ginkgo destruido y prácticamente quemado
empezó a brotar. Pero además este
impresionante árbol fue capaz de sobrevivir a los periodos de glaciación.
También ha sido capaz de defenderse de una amplia gama de atacantes; insectos,
bacterias y hongos.
En
España se puede disfrutar de la belleza y majestuosidad de los Ginkgos biloba en diferentes provincias entre ellas, podemos
destacar: el Parque del Retiro, la Plaza de la Lealtad, los jardines del Parque
de la Fuente del Berro en Madrid y el Parque de la Ciudadela de Barcelona.
Portada
de uno de los tomos del libro de Engelbert Kaemper de 1712
Madrid – Parque del Retiro, Ginkgo biloba en
los jardines de Herrero
Palacios,
zona del antiguo Parque zoológico
Detalle de las
hojas especiales del Ginkgo
Madrid – Magnífico
Ginkgo biloba de los jardines de la
Plaza de la Lealtad
Impresionante
rama del Gingko y detalle de sus hojas.
Madrid – Ginkgo biloba, es el más viejo de la capital y está situado en
los
jardines del Parque de la Fuente del Berro.
Detalle
de las ramas y las hojas
Barcelona – Hermoso
Ginkgo biloba, situado en el Parque
de la Ciudadela
Detalle
de las ramas y las hojas
Las
hojas son de color verde claro, entre 5 y 15 cm, son planas y en
forma
de abanico con nervadura dicotómica. En los femeninos, las
flores
se encuentran en grupos de dos o tres produciendo semillas
blandas
de color marrón amarillento.
Alejandro
Belaústegui Fernández
Titulado en Cultura
y Civilización (Socio nº 17)
No hay comentarios:
Publicar un comentario