TORO (ZAMORA)
LA MUY ANTIGUA, MUY NOBLE Y MUY LEAL
De entre las varias ocasiones en que las Cortes del Reino se reunieron en la ciudad, ninguna tan conocida y famosa como aquella que originó la promulgación de las Leyes de Toro (83 Leyes promulgadas el 7 de marzo de 1505). En el cuadro grandioso de la historia de Castilla, madre de España, pocas ciudades habrá con tantos y tan gloriosos títulos ennoblecidos como la de Toro, según nos describe el que fue ilustre cronista de la ciudad Francisco Casas y Ruiz del Árbol en su libro “Motivos de Toro”. Recientemente, por motivos familiares, he tenido ocasión de disfrutar de la hospitalidad de los toresanos, disfrutando de los monumentos y del paisaje que rodea la ciudad. Adjunto unas fotografías de una de las vistas panorámicas, tomadas desde el mirador del Espolón, situado detrás de la Colegiata, del Puente Viejo del siglo XII sobre el Duero (también conocido como romano), que cuenta con 26 arcos de medio punto, con grandes dovelas almohadilladas, cuyos pilares se hallan reforzados por ligeros machones, su longitud es de 176 m. y el ancho entre pretiles de 3,70 m. Parece que los residuos arqueológicos nos indican que tal vez esté asentado sobre la base de un puente romano anterior.
Vista panorámica desde el Espolón
Fotografías desde la orilla, al atardecer
Alejandro Belaústegui Fernández
Noviembre 2011
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